La ciencia también tienen buen humor, y así lo demostraron un grupo de científicos suecos que escondieron canciones de Bob Dylan en sus investigaciones como parte de una apuesta. El que escribiera más artículos con este formato antes de retirarse, ganaría un almuerzo en un restaurante de la zona. La apuesta lleva 17 años y dio como resultado muchos textos científicos… pero musicales.Ver también: Cómo afecta la música a nuestro cerebroLa respuesta está soplando en el vientoTodo comenzó en 1997 y el primer artículo de estos 5 amigos fue Nitric Oxide and Inflammation: The Answer Is Blowing In the Wind (Óxido Nítrico e Inflamación: la respuesta está soplando en el viento), como alusión a la que es probablemente la canción más conocida de Bob Dylan.Años más tarde otros dos compañeros usaron referencias para un trabajo sobre la habilidad de las células no neuronales de generar neuronas y lo llamaron Blood on the Tracks: ¿A Simple Twist of Fate?, como referencia a dos grandes canciones... Leer más.